lunes, 14 de marzo de 2011

¡¿Y qué pasó con la temporada?!



Poz si, esa es la misma cara que tengo cuando me vengo a enterar que, tras una semana de retraso, la fecha oficial del estreno del siguiente capítulo de Modern Family - Mi esperanza personal en la humanidad - se retrasa hasta el 23 de Marzo ¿¡Pero por qué los cagones del Fox van a hacer esperar tanto?! Se me ocurren un par de supuestos:

1.- El notorio aumento de Rating que han tenido los Simpson y más aún ahora que van por el Season Finale.
2.- La privilegiada posición en la que se encuentra la serie respecto a otras live action comedy como Community o la ya-casi-difunta Two and Half Men.
3.- Porque les da la puta gana.

Yo me decanto 100% por la última opción.

Si hay algo que me pone en una disyuntiva es quedarme sin series. Ya ya, tengo artas que todavía no me he acabado pero weon ¿Qué cosa más cómoda que sentarte a ver 22 minutos de humor hilarante y totalmente gratuito? Dale, que Spartacus no me entrega eso - Perdón! perdón! - bueno....casi...

Siempre he sido de la idea que uno las series las debería ver cuando las temporadas se acaban, cosa de que no te falten capítulos si el vicio te pilla y que, de soltarte, esté ahí lista esperando ser vista cuando te entren ganas. Ahora no tengo ni una ni la otra opción y estoy viéndome de cara con mi miedo más profundo: La vida real. Lo bueno es que existen varios calmantes para dicha afección; lo bueno de manejar el ocio al revés y al derecho es que puedes encontrar en cualquier lado una manera de malgastar tu tiempo y que parezca que estás haciendo lo productivo o, en su defecto, lo correcto.

Tres simples ideas
1.- Leer un libro: No por placer, no porque me lo recomendaron, solo porque estaba ahí. Te sientes, lo hojeas un poco, lees la contra-tapa y ya estás listo para utilizarlo como parte de tu arsenal intelectual cuando la situación lo amerite.
2.- Re-escucha un disco: Porque simplemente no has conocido música nueva en el último tiempo. Lo pones de fondo mientras haces cosas que realmente importan - Cocinar, nada más que eso. Ah si! comer, dos cosas en la lista - y ya puedes preparar una improvisada revisión de dichosa obra, cosa que a nadie le importa un carajo
3.- Sale a vitrinear: No tienes dinero ni nada que dar, vitrinear solo sirve para hacer algo de ejercicio sin darte cuenta y ver como está la calidad de la fauna femenina local. También es útil para, frente a una situación social donde no tengas un pito que tocar, sacar de la nada temas de vitrinas; siempre sirven, siempre salvan.

Entonces, mientras espero que la temporada continúe, que la vida retome su curso y que mi cerebro se ocupe con cosas que realmente importen, prepararé mis pasos para encaminarme a la ciudad y enfrentarme, una vez cada centuria, a lo que los mortales llaman esa sartén llena de secretos.

Fuck off with the correction.-

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